A propósito del debate sobre el aborto, un estudio a difundir
Hace poco el Instituto Guttmacher de Nueva York, publicó un informe titulado "Aborto en todo el mundo, una década de un avance desigual". ¿Qué ha cambiado desde el anterior informe en 1999; es un cambio para mejor? Es alentador que la tasa de aborto en todo el mundo haya caído. El descenso observado es de 17% (de 35 a 29 por 1000 mujeres en edad fértil; actualmente se dan 41.6 millones abortos al año); los resultados son en gran medida por una reducción de abortos no seguros en Europa Oriental, donde el aborto es legal. Sin embargo, la tasa de aborto disminuyó menos en las zonas donde el procedimiento es ilegal y por lo tanto sigue siendo inseguro. El mundo en desarrollo está ahora por delante de los países desarrollados el número de abortos que se hacen anualmente (29 contra 26 por cada 1000 mujeres en edad fértil).
La mortalidad materna en el mundo, debido a abortos, ha permanecido estática, a razón de 70000 muertes por año. La mayoría de las muertes todavía se producen en el África Subsahariana (38000) y el centro-sur de Asia (24000). Este saldo trágico e innecesario continúa sin cambios. Así, en algún lugar del mundo muere una mujer cada ocho minutos a causa de un aborto inseguro.
Los abortos inseguros y las complicaciones relacionadas con ellos ocurren casi exclusivamente en el mundo en desarrollo, según el informe de Estados Unidos. Una mujer pobre en una zona rural está más expuesta a atenciones tradicionales y al aborto con métodos inseguros; existen tres veces más probabilidades de presentación de complicaciones del aborto inseguro y la mitad de probabilidades de recibir tratamiento médico en comparación con una acomodada mujer en una zona urbana. En todo el mundo, ocho millones de mujeres tienen complicaciones por el aborto, pero sólo cinco millones reciben la atención necesaria.
El informe indica que el 40% de las mujeres de en edad fértil (15-44 años) viven en países con leyes muy restrictivas sobre el aborto (que permiten el aborto sólo para salvar la vida de una mujer o para proteger su salud física o salud mental). A pesar de que 19 países han aplicado las leyes de aborto menos restrictivas desde 1997, el aborto sigue siendo ilegal en 32 países. Y en el 3% de la los países del mundo (incluyendo a Nicaragua y El Salvador) el procedimiento está prohibido en cualquier circunstancia.
El informe hace hincapié en que el acceso al aborto seguro es aún muy restringido para las mujeres en el mundo en desarrollo. En la India, por ejemplo, tres décadas después de la legalización, dos abortos seguros se realizan para cada tres inseguros, simplemente porque la mayoría de las clínicas de aborto están ubicadas en los centros urbanos, mientras que el 70% de las mujeres de la India viven en un entorno rural. Del mismo modo, en Sudáfrica, tres años después de la legalización, sólo un tercio de las instalaciones sanitarias son usadas para dicha actividad. Barreras adicionales al aborto son el alto presupuesto, ya éste incluye un alto costo de procedimiento, además de la insuficiencia de médicos capacitados, y la falta de confidencialidad (se necesitaba consentimiento de un miembro de la familia).
El mensaje principal del informe es que la prevención de los embarazos no deseados sigue siendo la estrategia fundamental para la reducción de los abortos inseguros. Un tercio de todos los embarazos (208 millones al año) son no deseados y la mitad concluye en el aborto. Y dos tercios de los embarazos no deseados son causados por la falta de métodos anticonceptivos.
Los embarazos involuntarios han disminuido en todo el mundo en 20% desde 1995 (69 a 55 por cada 1000 mujeres de en edad fértil). Entretanto, el uso de anticonceptivos ha aumentado en muchas partes del mundo, especialmente en Asia, (de 57% a 68%) y en América Latina (del 62% al 71%), mientras que es menos utilizada en África (aumento del 17% a 28%).
La proporción de mujeres casadas que hacen uso de anticonceptivos a nivel mundial aumentó del 54% al 63%. África Subsahariana tiene el menor uso de anticonceptivos, la mayoría de los embarazos no deseados, el menor número de abortos seguros, y el mayor índice de mortalidad como consecuencia de un aborto.
Llegar a la meta final del Desarrollo del Milenio - una reducción del 75% de la mortalidad materna en todo el mundo al 2015 - será imposible sin hacer frente con éxito a los abortos inseguros. La atención sobre el aborto debe ser urgente, inmediata y multidimensional.
Mejorar la educación sexual y acceso efectivo a los métodos anticonceptivos puede reducir la tasa de embarazos no deseados y la necesidad de abortos inseguros.
La ampliación de los servicios de salud reproductiva puede extender la cobertura y la calidad de la atención pos aborto. La desaparición de las restricciones legales sobre el aborto no sólo puede hacer el procedimiento más accesible, menos costoso y más seguro, sino también promover el acceso a los derechos humanos fundamentales para las mujeres en todo el mundo.
El actual clima político es favorable, porque la regla de mordaza global (derogada por el actual Gobierno de EE.UU. sobre la prohibición de la política de la financiación de organizaciones extranjeras vinculadas a cualquier tipo de práctica de aborto) está fuera de vigencia. En los pocos minutos que he tomado para leer este texto, una mujer ha muerto de un aborto inseguro. Es momento de actuar es ahora.
La mortalidad materna en el mundo, debido a abortos, ha permanecido estática, a razón de 70000 muertes por año. La mayoría de las muertes todavía se producen en el África Subsahariana (38000) y el centro-sur de Asia (24000). Este saldo trágico e innecesario continúa sin cambios. Así, en algún lugar del mundo muere una mujer cada ocho minutos a causa de un aborto inseguro.
Los abortos inseguros y las complicaciones relacionadas con ellos ocurren casi exclusivamente en el mundo en desarrollo, según el informe de Estados Unidos. Una mujer pobre en una zona rural está más expuesta a atenciones tradicionales y al aborto con métodos inseguros; existen tres veces más probabilidades de presentación de complicaciones del aborto inseguro y la mitad de probabilidades de recibir tratamiento médico en comparación con una acomodada mujer en una zona urbana. En todo el mundo, ocho millones de mujeres tienen complicaciones por el aborto, pero sólo cinco millones reciben la atención necesaria.
El informe indica que el 40% de las mujeres de en edad fértil (15-44 años) viven en países con leyes muy restrictivas sobre el aborto (que permiten el aborto sólo para salvar la vida de una mujer o para proteger su salud física o salud mental). A pesar de que 19 países han aplicado las leyes de aborto menos restrictivas desde 1997, el aborto sigue siendo ilegal en 32 países. Y en el 3% de la los países del mundo (incluyendo a Nicaragua y El Salvador) el procedimiento está prohibido en cualquier circunstancia.
El informe hace hincapié en que el acceso al aborto seguro es aún muy restringido para las mujeres en el mundo en desarrollo. En la India, por ejemplo, tres décadas después de la legalización, dos abortos seguros se realizan para cada tres inseguros, simplemente porque la mayoría de las clínicas de aborto están ubicadas en los centros urbanos, mientras que el 70% de las mujeres de la India viven en un entorno rural. Del mismo modo, en Sudáfrica, tres años después de la legalización, sólo un tercio de las instalaciones sanitarias son usadas para dicha actividad. Barreras adicionales al aborto son el alto presupuesto, ya éste incluye un alto costo de procedimiento, además de la insuficiencia de médicos capacitados, y la falta de confidencialidad (se necesitaba consentimiento de un miembro de la familia).
El mensaje principal del informe es que la prevención de los embarazos no deseados sigue siendo la estrategia fundamental para la reducción de los abortos inseguros. Un tercio de todos los embarazos (208 millones al año) son no deseados y la mitad concluye en el aborto. Y dos tercios de los embarazos no deseados son causados por la falta de métodos anticonceptivos.
Los embarazos involuntarios han disminuido en todo el mundo en 20% desde 1995 (69 a 55 por cada 1000 mujeres de en edad fértil). Entretanto, el uso de anticonceptivos ha aumentado en muchas partes del mundo, especialmente en Asia, (de 57% a 68%) y en América Latina (del 62% al 71%), mientras que es menos utilizada en África (aumento del 17% a 28%).
La proporción de mujeres casadas que hacen uso de anticonceptivos a nivel mundial aumentó del 54% al 63%. África Subsahariana tiene el menor uso de anticonceptivos, la mayoría de los embarazos no deseados, el menor número de abortos seguros, y el mayor índice de mortalidad como consecuencia de un aborto.
Llegar a la meta final del Desarrollo del Milenio - una reducción del 75% de la mortalidad materna en todo el mundo al 2015 - será imposible sin hacer frente con éxito a los abortos inseguros. La atención sobre el aborto debe ser urgente, inmediata y multidimensional.
Mejorar la educación sexual y acceso efectivo a los métodos anticonceptivos puede reducir la tasa de embarazos no deseados y la necesidad de abortos inseguros.
La ampliación de los servicios de salud reproductiva puede extender la cobertura y la calidad de la atención pos aborto. La desaparición de las restricciones legales sobre el aborto no sólo puede hacer el procedimiento más accesible, menos costoso y más seguro, sino también promover el acceso a los derechos humanos fundamentales para las mujeres en todo el mundo.
El actual clima político es favorable, porque la regla de mordaza global (derogada por el actual Gobierno de EE.UU. sobre la prohibición de la política de la financiación de organizaciones extranjeras vinculadas a cualquier tipo de práctica de aborto) está fuera de vigencia. En los pocos minutos que he tomado para leer este texto, una mujer ha muerto de un aborto inseguro. Es momento de actuar es ahora.
Fuente: Foro salud
0 Yo te digo, tu me dices...:
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